La naturaleza humana de la Calidad

La Calidad es más que un atributo. La Calidad es una Actitud.
Excelente video de reflexión acerca la importancia de la Calidad. No es un video nuevo, pero su vigencia es latente. Tal vez la diferencia es que en estos tiempos, la Calidad sigue siendo fundamental, pero la velocidad para lograrla es 100 veces mayor a la que se requería cuando este material fue realizado.
Vale la pena hacer un alto en la vorágine de la cotidianeidad, un alto a las crisis y urgencias del trabajo para disfrutar y compartir este video que representa un excelente compendio de consejos para valorar lo que hacemos y cómo lo hacemos.


Al final del video se refuerzan seis elementos acerca de la importancia de la Calidad en el trabajo:

1. Sus Clientes son cualquier persona que recibe un trabajo de su parte.

2. El concepto de Cliente, no está limitado al usuario final de los productos y/o servicios de su organización.

3. Identifique quiénes son sus Clientes internos y externos.

4. La Calidad de su trabajo afecta directamente a sus Clientes para bien o para mal.
5. Los Clientes hacen una clara elección, lo buscarán o lo evitarán.

6. La persona que más se beneficia de un trabajo hecho con Calidad, es usted mismo.

Usted es lo que hace ¿qué tipo de persona dicen sus Clientes que es usted?

Las relaciones amorosas y/o de amistad en las organizaciones del siglo 21

En los años posteriores a la Segunda Guerra Mundial, las organizaciones lucharon contra las relaciones sentimentales dentro del trabajo a medida que se incrementaba la cifra de mujeres que se incorporaba al mercado de trabajo. “La legislación sobre la igualdad de derechos en muchos países hizo que la mayoría de las organizaciones estuviesen más preocupadas por las citas en el lugar de trabajo o cualquier conducta que pudiese ser interpretada como acoso. La política de “cero-citas” entre subordinados y superiores era lo habitual. Algunas organizaciones tenían políticas de este tipo incluso entre compañeros del mismo rango, aunque no era habitual su obligado cumplimiento”.

Hoy en día, prohibir las relaciones personales en el trabajo ya no es tan habitual como antaño; según la profesora de Sociología de la Universidad Estatal de California Janet Lever, uno de los motivos es que las políticas rígidas que prohíben tener citas son frecuentemente una invitación a presentar demandas judiciales por discriminación, ya que en la práctica suelen penalizar más a las mujeres que a los hombres. La probabilidad de que los hombres sean supervisores, añade Lever, es más alta, y si un superior masculino y una subordinada empezaban a salir juntos, normalmente era la mujer la que era trasladada o despedida.

La política de cero-citas simplemente no se ajusta a un entorno laboral moderno en el que prácticamente la mitad de los trabajadores son mujeres, sugiere Lever. Hoy en día la gente tarda más tiempo en casarse, y en muchos casos tiene jornadas laborales más prolongadas en comparación con sus padres. La gente conoce a otras personas con intereses similares en el trabajo, y los empleadores deben asumir que erradicar las relaciones personales no es algo realista. “La gente está empezando a aceptar el hecho de que no hay nada malo en tener una cita” con alguien del trabajo, aunque Lever está de acuerdo en que las relaciones supervisor-subordinado aún siguen siendo tabú.

Una encuesta realizada por la firma de recolocación Challenger, Gray & Christmas, con sede en Chicago, encontraba que el número de empleados estadounidenses que entraban dentro de la categoría de solteros había aumentado un 18,3% entre 1995 y 2005 hasta alcanzar prácticamente los 59 millones de personas, cerca del 44% de la fuerza de trabajo. Casi la mitad de los trabajadores solteros tenían edades comprendidas entre los 20 y los 34 años, la edad en la que se tienen más citas, concluía el estudio. “Nadie pone en duda que las citas a través del trabajo han ido en aumento entre esos 28 millones de jóvenes, algunos de los cuales pasan más tiempo juntos en la oficina que fuera del trabajo”, escribe el consejero delegado de la firma, John A. Challenger. “Los empleadores no tienen otra opción más que permitir citas en el lugar de trabajo”.

Challenger señala que un informe de 2003 realizado por American Management Association (AMA) reveló que el 30% de los gerentes habían tenido citas con colegas del trabajo, y que el 96% de ellos afirmaban que era aceptable salir con un compañero de trabajo que no fuese ni subordinado ni superior jerárquico. “Claramente, las citas en la oficina han ganado aceptación en la última década, pero las organizaciones deberían tener cuidado en lo que respecta a las relaciones en el lugar de trabajo. Las organizaciones deberían intentar establecer una serie de principios para evitar potenciales problemas, incluyendo reclamaciones por acoso, cotilleos en la oficina o una menor percepción moral”.

El informe de AMA señalaba que el 12% de las organizaciones habían redactado políticas sobre las citas. De ese porcentaje, el 92% prohibía que los superiores saliesen con subordinados, y el 11% prohibía salir con un compañero del mismo rango.

Las empresas que eligen no abordar el tema de las relaciones sentimentales en el trabajo podrían acabar en una situación delicada si una de estas relaciones se vuelve amarga”, escribe Challenger. “Estas situaciones pueden acabar rápidamente en demanda por acoso sexual. Pueden surgir otros problemas si uno de los dos es ascendido. Las empresas pueden tener problemas para convencerles de que una relación antes permitida está ahora prohibida”.

¿Cuál es la mejor política?

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Es buen momento de cerrar ciclos y establecer metas para 2011

Ahora que inicia el último mes del 2010, es un buen momento para evaluar el resultado del año que termina, así como iniciar el proceso de establecimiento de metas para el año que inicia.
Realizar un cierre de expectativas y objetivos cumplidos, evaluar el avance y logros alcanzados, es un proceso fundamental para aprender, tanto en lo individual como en lo organizacional.
Ya sea que se realice un proceso de Planeación Estratégica, o que simplemente se haga un alto para evaluar y definir lo que se quiere lograr; lo que importa es el detener la inercia, por muy positiva que esta sea, para alzar la vista, evaluar el entorno y definir los pasos siguientes. No hacerlo equivale a ir ganando la carrera y no ver que metros adelante se encuentra una vertiente de dos caminos en el que uno de ellos nos lleva a un precipicio.
Aprender, tanto del éxito como del fracaso; desaprender lo que impida avanzar con mayor velocidad, identificar los elementos que impulsarán, así como los que obstaculizarán el desempeño futuro, emprender las iniciativas que nos acercarán a las metas que nos hemos trazado, son los objetivos fundamentales de dedicar un momento para establecer las metas para el ya próximo 2011.