El amor verdadero no es recíproco, es honesto

En este mundo de relaciones líquidas; de promiscuidad virtual y física; de falta de valor y de valores; de verdades a medias; de mentiras piadosas y de parejas desechables; parecería que el amor verdadero está en peligro de extinción.

Es un hecho que el mundo ha cambiado, que las formas de relacionarse con los demás ha evolucionado de manera disruptiva; que las posibilidades de obtener placer está a tan solo un toque del teléfono inteligente, sin importar el momento, el entorno y ni siquiera la compañía.

Es también una realidad que «SIEMPRE» y «NUNCA» son demasiado tiempo para la falta de paciencia, tolerancia y compromiso de la sociedad actual.

Por todo ello, el amor verdadero en esta «nueva realidad» no es ya una relación recíproca y mucho menos eterna.

El amor verdadero se demuestra con la honestidad.

En esta nueva realidad las relaciones humanas se han transformado, mas la transparencia, la claridad y la honestidad son cada día más apreciadas por las nuevas generaciones. La equidad en la diversidad solo es posible de lograr a través de la empatía y del respeto al otro.

Aquella persona que de verdad ame a otra, lo demostrará al expresar la verdad a su pareja, dándole a ésta la posibilidad de decidir aceptar dicha verdad, por muy dolorosa que ésta sea.

Hablar con la verdad es una muestra de respeto invaluable. Respetar a tu pareja es un acto de amor verdadero.

Amar de verdad significa comprender que la mentira, el engaño, incluso el ocultamiento, no son formas de «cuidar» al otro.

Amar de verdad implica el valor de expresar nuestros errores, debilidades, incluso perversiones; solo así la otra persona podrá, con verdadero conocimiento, aceptar estar y compartir tiempo a tu lado.

Es un hecho que se requerirán nuevas reglas de convivencia, establecer acuerdos que ayuden a permanecer en medio de las condiciones que la verdad haya generado. Habrá los que construyan una relación poderosa y generadora de momentos felices juntos. Habrá quienes decidan no estar, y está bien.

Amar de verdad es aceptar las decisiones de la otra persona.

Si amas de verdad, regálale a esa persona una historia de vida honesta y verdadera.

Un pensamiento en “El amor verdadero no es recíproco, es honesto

  1. ¿Amor recíproco?
    Suena bonito, más poco real.

    El amor es lo que es, no lo que uno sueña o espera.
    ¿Puede un alma rota amar? Seguro que sí y amará desde sus fragmentos.
    ¿Puede una persona infiel amar? Seguro que sí y amará desde su miseria.

    El amor es es lo que es, lo que puede ser desde lo que cada persona puede dar.
    El amor es lo que es, lo que puede ser desde lo que cada persona está dispuesta a aceptar.

    El amor se nutre de momentos que completan vacíos. Cada persona elegirá con qué y con quién llenar esos huecos.
    Hay personas con tantos vacíos que no se pueden llenar con «un solo amor».
    Hay almas tan rotas que sus pedazos no están en solo un par de manos.
    Hay cuerpos tan huecos que no los puede llenar solo otro cuerpo.

    Al final el amor es una decisión desde tu riqueza, o desde tu pobreza.
    Nadie puede dar lo que no tiene.
    Cada quien acepta lo que requiere para completar su vida.

    El amor es lo que es, puede ser recíproco de pobreza y vacíos, o de riqueza, complementariedad y armonía.

    Existe reciprocidad en el amor que se profesan dos almas rotas, dos infieles, dos cuerpos vacíos. Con entregas parciales y verdades a medias. Es amor incompleto, sin entrega total, es mediocre, es conveniente. Es un amor de escape, de olvido… más hay reciprocidad.

    El amor de las personas completas y abundantes es así: completo y abundante; por ello, son capaces de dar sin esperar recibir, se entregan completos, sin miedos, sin secretos, sin reservas ni condiciones. Son capaces de amar sin esperar reciprocidad.

    El universo busca el equilibrio y lo encontrará en la reciprocidad y también en la complementariedad.
    El amor no es justo, es lo que es.

    JDR

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.